Cuando nos ponemos frente a frente de uno de los tratamientos antiaging más demandados pocas dudas podemos tener sobre su efectividad.
Pero hoy, queremos que sea la Dra. Marta Suárez, con su amplia experiencia en el uso de ácido hialurónico en el ámbito de la medicina estética, quien nos hable sobre los usos y beneficios que tiene el ácido hialurónico.
¿Qué es el ácido hialurónico?
El ácido hialurónico es una molécula presente en nuestro organismo, más en concreto en los cartílagos, articulaciones y en la piel.
En cada lugar cumple una función, pero es en la piel donde actúa como agente hidratante y a la vez que haga de soporte para la misma, lidiando así contra los efectos del paso del tiempo.
Podéis pensar que si ya existe en nuestra piel no sería necesario aplicarlo, pero no es así, ya que a medida que envejecemos disminuye la producción natural de ácido hialurónico. El tejido de nuestra piel se deshidrata y el colágeno y las fibras de elastina pierden su estructura, lo que provoca la pérdida de volumen de la piel y la formación de las arrugas y los pliegues faciales que son características habituales de la piel envejecida.

¿Cómo se puede aplicar el ácido hialurónico?
Podemos encontrar ácido hialurónico en cosméticos, pero la forma en la que podemos apreciar mayores resultados con su aplicación es a través de rellenos dérmicos.

¿Qué podemos mejorar con el ácido hialurónico?
El ácido hialurónico se puede inyectar en nuestra piel para rellenar y alisar zonas específicas. Las inyecciones de ácido hialurónico se aplican para:
- Reducir las arrugas de la frente y el entrecejo.
- Modelar las mejillas, mentón y el óvalo facial.
- Corregir las líneas faciales y la forma de los labios.
- Pliegues nasolabiales y código de barras.
- Corregir el aspecto del contorno de los ojos (bolsas, ojeras y patas de gallo).
- Minimizar la aparición de flacidez.
- Reducir la aparición de depresiones en la piel provocadas por las cicatrices del acné o las lesiones.
- Mejorar la elasticidad y la hidratación del rostro, las manos, el cuello y el escote.
El ácido hialurónico también tiene un papel fundamental a la hora de reducir el daño oxidativo en nuestra piel provocado por factores tanto internos como externos, como la radiación UV (también denominado fotoenvejecimiento).
Dicho esto, solo queda animaros a incorporar el ácido hialurónico a vuestra rutina de belleza y pensar en aquellas zonas que os gustaría mejorar. Os aseguro que, el resultado súper natural os va a encantar, lo principal es poneros en manos de un profesional experto en tratamientos con ácido hialurónico.